La Comunidad de Madrid inicia mañana una campaña informativa para acercar a la población los nuevos servicios y prestaciones de Atención Primaria (AP), teniendo en cuenta que cada día 340.000 personas visitan los más de 430 centros de salud y consultorios locales públicos de la región.
Tu Atención Primaria es lo primero gira en torno a tres ejes: cercanía con los ciudadanos, accesibilidad para acceder a los profesionales y capacidad resolutiva, logrando que el 90% de las consultas se resuelva en el propio dispositivo. Se difundirá hasta el próximo 30 de noviembre en los principales periódicos, radios y medios digitales, además de redes sociales como YouTube e Instagram. También se podrá ver en pantallas de las estaciones de Metro y Cercanías, así como en oficinas de Farmacia.
Entre los mensajes destacan la financiación por parte del Ejecutivo autonómico de tratamientos dentales a mayores de 80 años para la colocación de prótesis y reparaciones de caries, y tratamientos más complejos a menores de 7 a 14 años. También que desde este verano la población infantil hasta 14 años dispone gratuitamente de gafas graduadas.
La campaña incide también en las ventajas que ofrece la Tarjeta Sanitaria Virtual o la propia web de Atención Primaria a la hora de pedir cita para una consulta o conocer información sanitaria en general. Y contempla la labor de los trabajadores sanitarios tanto dentro de los dispositivos de AP como a domicilio, así como la de las 23 Unidades de Atención a Residencias (UAR), los siete equipos de Soporte de Atención Paliativa Domiciliaria (ESAPD) y el Centro de Atención Telefónica.
Profesionales asignados
Igualmente, recuerda que cada usuario del primer nivel asistencial de la sanidad pública madrileña tiene asignado odontólogo, fisioterapeuta, trabajador social, y, en el caso de las mujeres, matrona. Esta última categoría profesional tiene, además de en los cuidados del embarazo y el postparto, un papel fundamental en la salud sexual y reproductiva, la realización de citologías y el seguimiento de la menopausia.
También se pone el acento en la continua dotación de recursos tecnológicos, como ecógrafos para diagnosticar dolencias musculares, cardiológicas o respiratorias, la retinografía o espirometrías para medir la capacidad pulmonar.